Crecimiento mundial en 2011 llegará a 4,4%, dice FMI
Bogotá. Según el informe "Perspectivas de la economía mundial", publicado ayer, el estimado del PIB mundial logró un cuarto de punto porcentual más que lo proyectado en la pasada edición de este informe, publicado en octubre de 2010.
Se consideran dos ritmos distintos de crecimiento para los países desarrollados y para los emergentes. Éstos últimos estarían caracterizados por un mayor ritmo de crecimiento (de 6,5%) mientras que la actividad de las economías avanzadas se proyecta que aumentará 2,5%, tanto para 2011 como para 2012.
El programa fiscal de Estados Unidos adoptado a finales del año pasado, apoyado por un programa de Japón y la compensación entre el decremento de las economías de la periferia de la zona euro contrarrestado con el crecimiento de Alemania; son hechos que influenciaron el incremento del estimado de la cifra del PIB mundial.
Incluso, acontecimientos ocurridos en 2010 generaron mejores condiciones de desarrollo económico, tales como el crecimiento de los mercados accionarios, las condiciones de crédito bancario en las economías avanzadas se distensionaron así como las condiciones financieras mundiales mejoraron.
No obstante, se considera que un elemento clave fue el grado más limitado de contagio a los mercados financieros de otros países.
De acuerdo con el informe, el contexto de recuperación que está surgiendo, prevé una distensión más profunda de las condiciones de crédito bancario en las grandes economías y una intensificación de la emisión de bonos de empresas no financieras. Aunque la periferia de la zona euro es muy probable que las condiciones financieras sigan siendo tensas.
Respecto al petróleo, el crudo tendría una presión al alza en sus precios, por una constante demanda enérgica y el estimado del precio es de US$90 el barril.
Precauciones y recomendaciones
El informe plantea que existen altos factores de riesgo a la baja, dentro de los cuales se plantea que los países de la zona euro continuarían en riesgo de proliferación de la crisis económica.
Así mismo, están incluidos la ausencia de políticas de consolidación fiscal a mediano plazo en las economías avanzadas, la debilidad del mercado inmobiliario estadounidense y un rápido recrudecimiento de las presiones inflacionarias de las economías emergentes.
La recomendación dada por el FMI está arraigada en determinar medidas exhaustivas y rápidas para superar los problemas soberanos y financieros en la zona del euro, así como aplicar políticas para corregir los desequilibrios fiscales y sanear y reformar los sistemas financieros en las economías avanzadas.
A pesar del desequilibrio, la economía mundial aún está interconectada y surge, entonces, la necesidad de establecer medidas en cada país que permita reducir el riesgo a la vulnerabilidad y también para reequilibrar el crecimiento.
Mientras la zona euro precisa de medidas para aliviar la tensión financiera y para enfrentar las posibilidades de decaer, los demás países desarrollados deberán continuar con la implementación de políticas para el saneamiento y reforma de los sistemas financieros. Por su parte, el reto de los países emergentes será establecer directrices para una política monetaria restrictiva, si surgen condiciones de recalentamiento.
El crecimiento de países emergentes y de economías avanzadas será desigual, hecho que las naciones emergentes, con fuerte potencial económico, deberán aprovechar al máximo.
África mantendrá el crecimiento en los próximos años
Africa Subsahariana tiene una proyección de crecimiento de 5,5% en 2011 y de 5,8% para 2012; cifras que superan el de todas las demás regiones exceptuando las economías en desarrollo de Asia. De acuerdo con el informe del FMI, "la demanda interna está respaldada por los estabilizadores automáticos, la expansión de programas de inversión pública y apoyo social, y una orientación monetaria aún acomodaticia". Los países exportadores de petróleo y de bajo ingreso se destacarán frente a los países de ingreso mediano que lograrían un crecimiento de 3,5% para 2011 y de 4% para 2012. Sin embargo, para la zona aún se presentan retos como el encarecimiento de los alimentos, para las poblaciones pobres urbanas, lo que hará que los gobiernos piensen en redes de protección social focalizadas.
Se consideran dos ritmos distintos de crecimiento para los países desarrollados y para los emergentes. Éstos últimos estarían caracterizados por un mayor ritmo de crecimiento (de 6,5%) mientras que la actividad de las economías avanzadas se proyecta que aumentará 2,5%, tanto para 2011 como para 2012.
El programa fiscal de Estados Unidos adoptado a finales del año pasado, apoyado por un programa de Japón y la compensación entre el decremento de las economías de la periferia de la zona euro contrarrestado con el crecimiento de Alemania; son hechos que influenciaron el incremento del estimado de la cifra del PIB mundial.
Incluso, acontecimientos ocurridos en 2010 generaron mejores condiciones de desarrollo económico, tales como el crecimiento de los mercados accionarios, las condiciones de crédito bancario en las economías avanzadas se distensionaron así como las condiciones financieras mundiales mejoraron.
No obstante, se considera que un elemento clave fue el grado más limitado de contagio a los mercados financieros de otros países.
De acuerdo con el informe, el contexto de recuperación que está surgiendo, prevé una distensión más profunda de las condiciones de crédito bancario en las grandes economías y una intensificación de la emisión de bonos de empresas no financieras. Aunque la periferia de la zona euro es muy probable que las condiciones financieras sigan siendo tensas.
Respecto al petróleo, el crudo tendría una presión al alza en sus precios, por una constante demanda enérgica y el estimado del precio es de US$90 el barril.
Precauciones y recomendaciones
El informe plantea que existen altos factores de riesgo a la baja, dentro de los cuales se plantea que los países de la zona euro continuarían en riesgo de proliferación de la crisis económica.
Así mismo, están incluidos la ausencia de políticas de consolidación fiscal a mediano plazo en las economías avanzadas, la debilidad del mercado inmobiliario estadounidense y un rápido recrudecimiento de las presiones inflacionarias de las economías emergentes.
La recomendación dada por el FMI está arraigada en determinar medidas exhaustivas y rápidas para superar los problemas soberanos y financieros en la zona del euro, así como aplicar políticas para corregir los desequilibrios fiscales y sanear y reformar los sistemas financieros en las economías avanzadas.
A pesar del desequilibrio, la economía mundial aún está interconectada y surge, entonces, la necesidad de establecer medidas en cada país que permita reducir el riesgo a la vulnerabilidad y también para reequilibrar el crecimiento.
Mientras la zona euro precisa de medidas para aliviar la tensión financiera y para enfrentar las posibilidades de decaer, los demás países desarrollados deberán continuar con la implementación de políticas para el saneamiento y reforma de los sistemas financieros. Por su parte, el reto de los países emergentes será establecer directrices para una política monetaria restrictiva, si surgen condiciones de recalentamiento.
El crecimiento de países emergentes y de economías avanzadas será desigual, hecho que las naciones emergentes, con fuerte potencial económico, deberán aprovechar al máximo.
África mantendrá el crecimiento en los próximos años
Africa Subsahariana tiene una proyección de crecimiento de 5,5% en 2011 y de 5,8% para 2012; cifras que superan el de todas las demás regiones exceptuando las economías en desarrollo de Asia. De acuerdo con el informe del FMI, "la demanda interna está respaldada por los estabilizadores automáticos, la expansión de programas de inversión pública y apoyo social, y una orientación monetaria aún acomodaticia". Los países exportadores de petróleo y de bajo ingreso se destacarán frente a los países de ingreso mediano que lograrían un crecimiento de 3,5% para 2011 y de 4% para 2012. Sin embargo, para la zona aún se presentan retos como el encarecimiento de los alimentos, para las poblaciones pobres urbanas, lo que hará que los gobiernos piensen en redes de protección social focalizadas.